lunes, 16 de noviembre de 2015

Terapia Familiar Crítica: 6 presupuestos fundamentales


Por Germán Ríos*

   La terapia familiar crítica es una propuesta que busca el cambio psicoterapéutico apoyado en el cuestionamiento de las estructuras sociales, donde se construye el síntoma. Está basada en nociones de sociología y antropología y es aplicado en lo  particular (el individuo) y la familia. A continuación se presentan 6 presupuestos fundamentales para una terapia familia crítica:

1.      Postura de curiosidad y  de experto. Tener en cuenta que como terapeuta uno es experto en la teoría y la persona es experta en su vida. La teoría te permite tener una visión del problema y posibles soluciones.  Hay pautas que superan la teoría y hay que procurar entenderlas.  Por ejemplo hace algunos años dominaba la familia formada por papá, mamá e hijos. Ahora hay familias monoparentales donde han cambiado la forma como las mamás se apoyan de los hombres para la crianza de sus hijos.

2.      Tomar en cuenta el aspecto emocional. El amor nos une como personas;  es necesario ver al otro como alguien legítimo. Tratar de entender el sentido de la conducta de las personas y aceptarlas. También aquí se incluye el darle importancia a lo que siente la gente no solo lo que dice. Por ejemplo hay conductas extrañas como el aislamiento que no tienen mucho sentido  a primera vista. Conforme se ahonda en la descripción de la historia de la persona se observa que es una forma de resolver la tensión que ha vivido en su familia.  Además puede que surja la tristeza, hay que permitir a la persona que explique a que  se refiere con esto, como actúa, que suele pensar y hacer, qué opina de su vida, sus amigos,  cuando se encuentra en este estado, etc.


3.      No dar nada por sentado. Hay algunas creencias que se asumen como “normales”. Por ejemplo la persona te dice que es importante tener una licenciatura. Suele pasar que se confirma ese asunto como una demanda social y no se pregunta cómo es que para esa persona es importante tener una licenciatura.


4.      La historia de un síntoma se construye en el aquí y en el ahora, por lo tanto es susceptible de cambio a partir de su propio contexto. Se pueden buscar relaciones que ayuden a contar de manera diferente los hechos, entender desde una nueva perspectiva esos mismos hechos relacionados con el malestar psicológico, entre otras opciones que apoyen reformulación de la  identidad de la persona.

5.      No todo vale. Aunque se acepte al otro,  no significa que toda acción  busca un bien en sí. En algunos casos este amor será acompañado de límites  aplicados de manera inteligente.  Por ejemplo un adolescente que pelea constantemente con su mamá, podrá encontrar nuevas forma de decir que no está de acuerdo y negociar sus permisos para salir. En lugar de hacer gestos de descalificación, podrá  escucharla y atender su necesidad de conocer quienes lo acompañan.


6.      Reflexionar sobre el quehacer como psicoterapeutas. Los ideales de lo bueno y   malo cambian. Al hacer altos y cuestionar el qué y para qué, con relación a nuestro quehacer terapéutico podemos encontrar algunas  limitaciones en estructuras  que ya no procuran un bien mayor. Por ejemplo hace algunos años lo importante era que la persona entendiera lo que pasaba en su familia,  esto ha  cambiado,  ya que algunas veces será importante que experimente una relación más positiva y luego podrá entender la persona lo  que pasa en su familia.

Si tomas en cuenta estos 6 puntos, contribuyes al cambio cualitativo de la persona desde la crítica de su contexto cercano, relacionado con estructuras sociales. Por ejemplo las mujeres que se sienten  culpables por separarse de su esposo,  pudieran cuestionar su creencia (social) de que deben de durar toda la vida casadas. Al poner en duda, de manera respetuosa  y con una estructura teórica sólida, sus creencias que ella ha normalizado, puedes generar un cambio modesto que está relacionado con ideas rígidas que poco abonan al crecimiento de la persona.


Fuente:
Medina, R. (2011). Cambios modestos, grandes revoluciones. Guadalajara: Red Américas.

http://tzapopan.com/libros-e/CM.pdf


*Germán Ríos Morfín, es psicólogo y terapeuta familiar, actualmente se desempeña como orientador educativo en el Instituto de Ciencias, docente en la Universidad Marista de Guadalajara y terapeuta clínico.

domingo, 25 de octubre de 2015

Técnicas de Terapia Breve Sistémica: El planteamiento del problema y la definición de objetivos.



    En la fase de definición de metas el terapeuta puede hacer uso de dos estrategias globales: 1) El planteamiento del problema o queja y la definición de objetivos y 2) La clarificación del problema. Abordaremos en este escrito la primera de ellas.

PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA Y DEFINICIÓN DE LOS OBJETIVOS.

     Es el desarrollo de un proyecto de trabajo negociado con los consultantes. Se compone de la construcción de una demanda manejable (constatación de un problema + petición de ayuda) y el acuerdo claro sobre la naturaleza y meta de lo que será nuestra intervención.

   La estrategia esencial consiste en traducir la queja inicial en una meta u objetivo alcanzable. Lipchick lo llama “proceso de aclaración de la meta”  y menciona que se da mediante un consenso entre el terapeuta y consultante desde la primera sesión hasta el fin de la terapia. El propósito es ayudar a los consultantes a describir de la manera más clara y precisa un estado deseado que contraste con el estado actual inundado por el problema.

   Cuando la demanda contiene errores en su definición (véase tabla de objetivos manejables) o cuando se vuelve difícil definir objetivos (debido a que los consultantes o a) ignoran el problema, o b) describen un problema donde no hay, o c) intentan solucionarlo a un nivel inadecuado) es necesario renegociarla, clarificando, redefiniendo o realizando una deconstrucción del problema (véase técnica de rastreo del problema).

OBJETIVOS.

      Beyebach (2006) describe los objetivos de esta técnica de la siguiente manera:


  • Alcanzar un acuerdo entre terapeuta y clientes de lo que se quiere lograr en el proceso terapéutico.
  • Llegar a cierto consenso acerca de los medios que se utilizaran para los fines.
  • Co-crear una demanda manejable.
  • Identificar la teoría del problema y la teoría del cambio de los clientes.

MODO DE EMPLEO.

Pasos para el planteamiento del problema 

1.  Iniciar con una pregunta abierta:

     Centradas en el problema:

“X me comentó brevemente el problema,  pero pedí que viniera la familia en pleno para saber qué piensa de él cada uno de ustedes”
¿Cuál es el problema que quieren resolver?

    Presuposicionales y centradas en la meta:

¿Qué es lo que desean cambiar en sus vidas?
¿Qué les hace falta lograr?
¿Qué les gustaría mejorar en su familia?

2.  Obtener una somera descripción del problema. 

    No es necesario en esta parte detallar demasiado, será suficiente con describir la(s) queja(s), la frecuencia, atribución y las personas involucradas. Es importante que el terapeuta mantenga una actitud de escucha y validación así cómo abstenerse de juicios acerca de las opiniones de los consultantes.

3. Resumen de lo tratado y propuesta de trabajo en común.

    Por ejemplo: “Así que, si los entiendo bien, quieren mejorar su comunicación y quieren que colaboremos con ustedes en una terapia de pareja”


Pasos para la definición de objetivos (Basado en Escudero)

1 Identificar y discutir problemas y necesidades de la persona o familia.

Se elabora con los consultantes una lista de pendientes propios o de quejas acerca de otros (preocupaciones). Se jerarquizan las quejas  por criterios de urgencia, importancia, etc. o se busca un denominador común.

¿Qué áreas de tu vida quisieras trabajar?
¿Qué cosas que habían estado pasando en los últimos días de tu vida quisieras evitar?
¿Qué conductas de tu hijo te preocupan?
¿Cuál consideras que es el problema más urgente?, ¿Con cual quieren comenzar?
¿En qué se parecen todas estas preocupaciones?


2 Poner etiquetas en afirmativo

     Ayuda a los consultantes a definir que esperan conseguir con cada uno de los problemas identificados.  En este paso es importante trabajar con las expectativas de los miembros de la familia.

Me queda claro que es lo que no quieren en su relación de pareja, ¿Podrían decirme que es lo que si quieren lograr en su relación?
Preguntas para diferenciar entre querer y necesitar:
¿Qué esperas obtener al…?
¿Para que quiere…?
Pongamos el caso de que él no pudiera cambiar en eso que los trajo aquí, ¿Qué es lo que ustedes harán para sobrellevar la situación?


3 Identificar indicadores de logro

    Ayuda a la familia a describir indicadores (conducta, habilidad, o situación concreta que mejor representa la meta) que permitan dar cuenta de que se ha alcanzado la meta u objetivo definido.

¿Qué te va a indicar que has alcanzado ese objetivo?
Imagina que sucede un milagro mientras estás dormido y el milagro consiste en que todo lo que querías resolver satisfactoriamente. A la mañana siguiente, ¿Cómo te vas a dar cuenta de que lo has logrado?
¿Cómo te vas a dar cuenta de que ya no necesitas venir a terapia?

4 Escalar los avances

 Ayuda a los consultantes a fragmentar la meta a partir de una descripción de la situación actual del problema y después comenzar por definir indicadores con la familia de lo que supondría un avance mínimo y rápido.

¿Cuál va a ser el primer paso para superar la depresión?
En una escala del 0 al 10, en donde 0 representa el peor momento del problema y el 10 que ya lo has superado completamente, ¿En qué número te encuentras en este momento de tu vida?
¿Cómo te vas a dar cuenta que has avanzado un punto en esa escala?
¿Qué va a ser diferente cuando hayas dado un pasito hacía tú meta?

5 Señalar el retroceso

    Ayuda a los miembros de la familia a reconocer la posibilidad de un empeoramiento de la situación y sus consecuencias.

¿Qué situaciones o conductas los haría empeorar?
¿Qué te indicaría que las cosas van empeorando?
¿Cómo te darías cuenta de que en vez de avanzar estás retrocediendo?


6 Definir actuaciones técnicas ligadas a metas

Ayuda a la familia a planificar la actuación técnica para el trabajo de la meta determinada. Para ello es importante dejar claro “Qué, Quién, Cómo, Dónde, y Cuándo” se llevará a cabo dicha intervención.

¿Cómo lo lograrán?
¿Qué hará cada uno para conseguirlo?
¿Qué aprendizajes les ayudarán a obtenerlo?

7 Supervisar y evaluar la consecución de metas

    Evaluar los avances en la consecución de la meta en las sesiones subsecuentes. Corregir procedimientos técnicos en caso de ser necesario e identificar obstáculos y riesgos de recaídas.

¿Qué va mejor?
¿Qué esfuerzos realizaron en estás semanas y que efecto tuvieron?
¿Qué les faltó?
¿Cuál es el siguiente paso que van a dar?



Tabla: Objetivos trabajables (Charles, 2007)

CRITERIO

PALABRAS
CLAVE

PREGUNTAS


En afirmativo


En vez de…


¿Qué estarás haciendo diferente en vez de…?


En forma de proceso


Cómo


¿Cómo lo estarás haciendo (logrando)?



En el aquí y el ahora



Estar en camino

Al salir de aquí, ahora ¿Qué harás diferente para darte cuenta que estás en el camino correcto?


Lo más específico


Específicamente

¿Exactamente cómo?
¿Qué indicará que…?


En el control del cliente


Tú/ustedes

Cuando lo logren ¿Qué estarás haciendo de otra forma que antes?


En el lenguaje del cliente


Sus propias palabras

Cuando logre “dejar de arrastrarse por el suelo” ¿En qué será diferente?



 Fuente:
Bayebach, Mark. 24 ideas para una psicoterapia breve. Herder, 2006.
Charles, Ruperto. Terapia breve sistémica. Soluciones para parejas y padres. Ed. Cree-Ser, 2007.
Escudero, Valentín. Guía práctica para la intervención familiar. Junta de castilla y León. Año desconocido.
Haley, Jay. Terapia para resolver problemas. Amorrortu. Buenos Aires, 1980.
Lipchick, Eve. Terapia centrada en la solución. Más allá de la técnica. Amorrortu. Buenos Aires, 2004.

viernes, 16 de octubre de 2015

7 presupuestos básicos de la Terapia de sesión única (TSU)


¿Puedes imaginar una terapia efectiva en tiempo breve?, ¿Puedes imaginar que el tiempo de la terapia no rebase la hora de la sesión inicial?, ¿Sería posible lograr cambios permanentes cuando sólo cuentas con una sesión para la intervención? El presente escrito expone una forma respetuosa y efectiva de ayudar a los consultantes en tiempo record. Se describe la Terapia de Sesión única (TSU) y 7 presupuestos principales que sustentan su práctica.  
  
¿Qué es una TSU?

La terapia de sesión única es una forma de terapia breve que surge por la inquietud de algunos terapeutas que han cuestionado la idea de que el cambio permanente sólo puede llegar mediante intervenciones de salud mental prolongadas y complicadas.

La característica principal del modelo es que trata cada sesión como una terapia completa. Los terapeutas que practican este enfoque parten de una fuerte convicción de que toda terapia puede ocurrir en una sesión y que en una sesión es posible generar un cambio significativo independientemente de la gravedad con que se pueda valorar al problema.

En la práctica, no difiere a otros modelos de terapia breve: los consultantes presentan una preocupación y construyen metas. El terapeuta invierte esfuerzos en dos vías. Por un lado, para que los consultantes terminen la sesión con la sensación de haber sido escuchados, con una mayor esperanza y conciencia de sus lados fuertes y recursos. Por otro, para que se comience a desarrollar un plan sobre cómo enfrentar sus preocupaciones. 

Presupuesto principales de la TSU

La terapia de sesión única tiene como principales fundamentos la Teoría general de sistemas (Bertalanffi, 1969), la cibernética (Kenney, 1994)  y el Construccionismo social (Gergen, 2006).  No es intención del presente escrito profundizar en los elementos epistemológicos de estás concepciones, antes bien enunciaremos algunos de los presupuestos básicos que fundamentan nuestra práctica:

1 “La mayoría de los procesos de terapia son breves”

La investigación de la eficacia y efectividad de los tratamientos confirma que la cantidad usual de sesiones, o la que ocurre con más frecuencia, en todos los modelos de terapia es una. (Boyhan, 1996; Bloom, 1992; Talmon, 1990) 

Por otro lado, se ha demostrado que el ritmo de cambio en el transcurso de la terapia decrece conforme aumenta el número de sesiones. Gran parte del cambio ocurre en las sesiones iniciales. (pekarik, 1992)

Cabe mencionar que existe suficiente evidencia empírica de que la terapia breve es efectiva (De shazer, 1986; Fisher, 1984; Weakland, 1974).  Para los terapeutas que utilizan un modelo ultrabreve resulta valiosa la visión que presenta De Shazer cuando menciona que no se trata de hacer menos que una terapia prolongada sino de alcanzar en el menor número de sesiones los mismos o mayores resultados.

2 “La terapia cómo método para resolver los problemas de la vida real”

Haley (1990) aconseja centrarse en los problemas de la vida cotidiana  y evitar orientar la entrevista a temas filosóficos o existenciales. Siguiendo está noción los  clínicos de la TSU adoptan la perspectiva de una terapia centrada en el problema y la solución.

Watzlawick y cols. (1992) nos ofrecen un marco para entender la formación y persistencia de problemas humanos en su obra cambio. Coincidimos con la concepción de que los problemas se generan y mantienen por los intentos de solución que han llevado a cabo las personas con el fin de resolverlo.

3 “No es necesario saber mucho del problema para resolverlo”

Para De Shazer (1988) el problema y la solución son dos categorías discontinuas y utiliza la metáfora de la llave y la cerradura para explicarlo. En sus términos, para abrir una puerta no es necesario tener una llave que se corresponda exactamente con la forma de la cerradura, sino que es suficiente con usar una ganzúa que abra el mecanismo.

En este sentido lo que para una persona puede ser una solución para otra con un problema similar no lo es. En una TSU se suelen construir soluciones o posibilidades a partir de las excepciones o de las expectativas que las personas tienen de sus vidas sin la presencia de las situaciones que les aquejan. Asumir este presupuesto ayuda a tomar atajos en el proceso y por ende acortar la terapia.

4 “Cada sesión puede ser una terapia entera”

De acuerdo al modelo de prochaska y Diclemente (1982) el cambio se logra pasando por etapas diferenciadas. Una persona puede, en tiempo variable,  pasar de una etapa a otra hasta lograr dar vuelta a la rueda de cambio. Basado en esta concepción del proceso de cambio, un terapeuta ultrabreve intentará identificar la etapa en que se encuentra su cliente y lo ayudará a completar, en el transcurso de la sesión y en la medida de lo posible, todo el ciclo.

5 “Sólo se necesita un pequeño cambio para iniciar una solución”

Los clínicos que utilizan la TSU asumen la premisa de totalismo de la Teoría General de Sistemas (Bertalanffi, 1969) en el sentido de que “un cambio en algún elemento del sistema genera cambio en los demás elementos del sistema y en el sistema total”.
También simpatizan con la idea del efecto avalancha, efecto dominó o efecto  mariposa que les permite planear sus intervenciones desde los recursos del propio cliente y valorar hasta el más pequeño de los cambios.

6 “Las personas cuentan con recursos para solucionar y hacer frente a sus dificultades”
En la práctica de la TSU se suelen tener en cuenta los recientes estudios acerca de la resiliencia personal (Cyrulnik, 2013) y familiar (Walsh, 2007) que proporcionan información acerca de la capacidad que tienen personas y familias para hacer frente a las adversidades y salir fortalecidas de ellas. Esta idea ayuda al clínico a tomar una postura de colaboración que permita evocar y ayudar a gestionar recursos y lados fuertes presentes. La terapia se convierte así en una consulta en donde el terapeuta ofrece ideas, propone nuevas visiones y acciones y el cliente decide tomarlas, rechazarlas o dejarlas en espera. 

7 “El lenguaje como eje central de la terapia”

En una TSU se concibe al lenguaje, en correspondencia con la posmodernidad, como el principal vehículo que da sentido a la realidad. Desde esta perspectiva constructivista, la terapia representa un proceso conversacional capaz de generar significados. Los terapeutas ultrabreves suelen estar de acuerdo con Tarragona (2006) cuando refiere que “la forma en la que pensamos y hablamos de nuestros problemas o dificultades puede contribuir a que nos hundamos más en ellos o podamos contemplar nuevas formas de verlos, de solucionarlos o transformarlos”.


Hasta ahora se ha definido a la TSU y enumerado los presupuestos principales que permiten fundamentar la práctica. Como se puede apreciar la mayoría de las premisas son compartidas con otros modelos de terapia breve. Tal vez la principal distinción sea la fuerte convicción, por parte del terapeuta de que una sesión es suficiente para lograr cambios y que, por ende, es necesario actuar de acuerdo a la idea de  “por si no te vuelvo a ver”.

Fuente:
Cirulnik, Boris. Los patitos feos. Gedisa. Barcelona, 2002
De Shazer, Steve. Claves para la solución en terapia breve. Paidós. Barcelona, 1988.
Haley, Jay. Terapia para resolver problemas. Amorrortu, Buenos Aires, 1990.
Prochaska, James.¿Cómo cambian las personas y cómo podemos cambiar nosotros para ayudar a muchas personas? Traducido de The Heart and Soul of Change: What Works in Therapy. Mark A. Hubble, Barry L. Duncan and Scott D. Miller (Eds.), Washington, DC: American Psychological Association, 1999, p. 227-255
 Slive, Arnold y Bobele, M. Cuando sólo tienes una hora: terapia efectiva para clientes de atención inmediata. Editorial Paidós. México, D.F., 2013
Talmon, Moshe. Single session therapy. Jossey Bass. 1990.
Tarragona, Margarita. Las terapias posmodernas: una breve introducción a la terapia colaborativa, la terapia narrativa y la terapia centrada en soluciones. Psicología Conductual, Vol. 14, Nº 3, 2006, pp. 511-532
Walsh, Froma. (2004) Resiliencia familiar. Estrategias para su fortalecimiento. Buenos Aires. Amorrortu.
Watzlawick, Paul. Cambio. Herder. Barcelona, 1992.

miércoles, 16 de septiembre de 2015

Historia de la terapia familiar según Minuchin


   Bateson es Don Quijote y Ackerman el Sancho Panza de la terapia familiar. Una aseveración de este tipo solo puede darla quien es autoridad en la materia. Con varias décadas de experiencia con familias, Salvador Minuchin ha ido y venido varias veces por el camino de la terapia con sistemas familiares. En el video Minuchin regresa, después de muchos años, a su natal Argentina para impartir una clase en la Universidad de Buenos Aires. Es 1997 y un veterano pionero de la terapia estructural lleva de la mano a los asistentes a un recorrido por la historia de la terapia con familias.

jueves, 20 de agosto de 2015

4 Pasos para realizar exitosamente una primera entrevista con familias (según Jay Haley)




Por Germán Ríos Morfín*

Para Jay Haley una terapia exitosa es aquella que resuelve los problemas de un cliente. El terapeuta asume el reto de formular el problema, definir objetivos y generar una estrategia para lograrlos. A continuación se presenta una guía de 4 pasos para la conducción de una entrevista exitosa con las familias.

1 Tiende la alfombra

En la entrevista  terapéutica Haley nos propone iniciar con una etapa social, donde podamos tener una conversación amena,  en la que la familia se sienta en confianza y se establezca una relación terapéutica suficientemente cercana para  que los integrantes platiquen con soltura de su situación.

2 Ayuda a la familia a plantear la problemática

En un segundo punto se   habla del problema. Desde un inicio  es importante observar cómo se describe, quien habla y que dice de lo que pasa. Puede ser que la primera persona que plantea la situación   problemática es la que “carga” con las interacciones disfuncionales de la familia.

Luego se busca conocer cuál es el punto de vista de los demás integrantes. Hasta este momento no se pretende hacer alguna intervención, aunque el solo hecho de escucharlos puede estar influyendo al sistema familiar de manera positiva. Será importante cuidar la participación de todos y su tiempo para expresar lo necesario.

3 Consigue traer a la entrevista la interacción problemática

El paso siguiente es que los participantes hablen del problema entre ellos, que interactúen. También aquí se puede pedir que se actúe la conducta problema y ver cómo reacciona la familia. Por ejemplo si la mamá es depresiva se le pide que se comporte de esa manera y los demás integrantes lo hagan como usualmente lo hacen.

Conforme avanza la sesión se define una problemática a atender, que pueda ser suficientemente clara como para ser la medida de los cambios que se logren durante el trabajo. En la primer etapa de definición hay que buscar que se describa detalladamente, evitando hacer preguntas cerradas o interpretaciones, sino ubicar pautas generales con preguntas del tipo “¿Esto es una forma como conviven en pareja?" o "parece que le cuesta entender la adolescencia cuando habla de sus hijos, ¿Qué opina de eso?”

4 Ayuda a la familia a establecer metas manejables

Cuando se establece el problema definido con la opinión de todos es el tiempo para establecer las metas que se quieren lograr, por ejemplo: Juanita no sale de su casa  y vive con ansiedad. Se observa que esto está más presente  desde que los papás han discutido con mayor regularidad los últimos 6 meses. A las hermanas no les gusta escuchar estos pleitos y se encierran también, lo que aumenta la ansiedad de Juanita porque no tiene con quien convivir. Las metas que se quieren lograr serían: disminuir la ansiedad y tener mayor convivencia con amigas y las hermanas  de Juanita.

 Aunque está el conflicto de los papás en un primer momento el enfoque está en calmar la ansiedad y favorecer la convivencia de Juanita con sus amigas y sus hermanas. Si se habla de los pleitos con los papás será para reflexionar en cómo estos afectan la conducta de Juanita, para buscar otros espacios de discusión y también para atender las necesidades de ella. Más adelante cuando se logre el primer objetivo, se puede replantear el problema y hablar de la situación de pareja.

En resumen la entrevista con familias puede concebirse como un proceso de etapas diferenciadas, un camino de cuatro grandes pasos: a) Etapa social, b) etapa del planteo del problema, c) etapa de interacción y d) etapa de fijación de la meta. Una vez transitadas estas etapas el terapeuta y la familia estarán en condiciones para agendar la siguiente sesión.

Fuente:
Haley, Jay. Terapia para resolver problemas. Nuevas estrategias para una terapia familiar eficaz. Amorrortu. Buenos Aires, 1999.


*Germán Ríos Morfín, es psicólogo y terapeuta familiar, actualmente se desempeña como orientador educativo en el Instituto de Ciencias, docente en la Universidad Marista de Guadalajara y terapeuta clínico.

viernes, 3 de julio de 2015

Técnicas de terapia breve sistémica: El preludio.


Utilizamos el concepto de “preludio” en el sentido que propone De Shazer (1996):

“En esta fase de la sesión…el conductor evita en lo posible todo examen de los motivos que llevaron a la familia a solicitar la terapia, centrándose en cambio en su contexto social”

Otros autores como Haley y Bayebach llaman a este momento inicial de la entrevista “fase social” debido a que se espera un contacto social entre el terapeuta y cada uno de los miembros de la familia. Para Haley (1980) en esta etapa el terapeuta “no permitirá que nadie empiece a comentar el problema hasta que no haya obtenido de cada entrevistado una respuesta “social”. El modelo para esta etapa son las reglas de cortesía que seguiríamos, como anfitriones, en nuestro hogar…”

La estrategia contempla preguntas sobre “lugar de residencia, su vecindario, sus costumbres en materia religiosa, el trabajo que desempeña cada integrante y las escuelas a donde asisten los niños, si los hay” (De Shazer, 1996)

OBJETIVOS

Coincidimos con De Shazer en que el propósito es “crear una relación asistencial, no amenazadora, con la familia en su totalidad, y averiguar de qué manera ve ésta el mundo”  

Otro propósito de esta estrategia es el de conocer a la persona al margen del problema iniciando para ello conversaciones que permitan separar a la persona del problema al promover mensajes del tipo de “el problema es el problema” o “tú eres mucho más que el problema”

Un objetivo más es el de obtener un visión global relacional de los consultantes que nos permita posteriormente entender los síntomas o problemas en relación a pautas familiares o sociales.

Finalmente, consideramos propósito de esta etapa el detectar recursos personales, relacionales y de la red social para poder utilizarlos en la búsqueda de alternativas y solución de problemas.

MODO DE EMPLEO

Comprende 2 tareas a desarrollar:

1 Recabar datos personales, familiares y de la red social.

Se recomienda recabar la información comenzando con lo trivial y cotidiano para que la conversación no se perciba amenazante y, en cambio, resulte fácil de contestar para todos los participantes.
La elaboración del familiograma resulta una forma eficaz de administrar y ordenar la información y permite obtener una fotografía instantánea de la familia y su contexto además de mantener un clima emocional distendido tal que haga posible la introducción del sentido del humor en la entrevista.
Se sugieren preguntas neutras, con poca carga emocional y preguntas circulares con el fin de construir temas relacionales, por ejemplo: ¿A quién más le gusta la música?, ¿Quién es el más ordenado?, etc.

2 Explorar lados fuertes y recursos personales y del sistema familiar.

Como se ha descrito arriba, conviene en esta etapa preguntar sobre valores, cualidades, destrezas y conocimiento de los consultantes con dos propósitos principales: obtener una primera imagen de la visión de mundo de los consultantes y realizar una especie de inventario de recursos y fortalezas que puedan estar disponibles para que los miembros de la familia los utilicen para resolver sus dificultades y mejorar sus vidas.
A continuación brindamos, a manera de ejemplo, 2 tipos de preguntas que se suelen usar en esta etapa:

a)    Preguntas directas: El interlocutor conversa sobre sus propias cualidades, lados fuertes y valores. Ejemplos son, ¿Qué es lo que más te gusta de tu forma de ser? O ¿Qué buenos valores obtuviste de tu familia de origen?.

b)    Preguntas cruzadas: El interlocutor conversa sobre las cualidades y los valores de los demás o imagina cómo los demás lo perciben. Son ejemplos ¿Cuáles son las cosas buenas que aprecia de Juanito?, ¿Qué es lo que más te gusta de tu mamá?, ¿Qué es lo que más le gusta de la forma en que su esposa educa a sus hijos?, ¿De qué cosas están orgullosos tus padres?, si pudiera preguntarle a tus amigos, ¿Que me dirían de las cosas que aprecian de tu persona?


Hasta aquí hemos presentado la técnica que aprovecha el preludio o fase social de la terapia para iniciar la relación terapéutica y enriquecer el conocimiento de cada uno de los miembros del sistema y el sistema total. Se ha descrito los objetivos y el procedimiento para lograrlos. ¡Puedes comenzar a practicarlo!

Fuente:
Beyebach, Mark., 24 ideas para una psicoterapia breve, Herder, Barcelona, 2006.
De Shazer, Steve. Pautas de terapia familiar breve. Paidós. Barcelona, 1996.

Haley, Jay. Terapia para resolver problemas. Amorrortu. Buenos Aires, 1980.

miércoles, 17 de junio de 2015

6 Experimentos lúdicos para el trabajo con familias




    En entrada anterior se ha presentado en forma breve el trabajo clínico de Matthew Selekman (entrevista-matthew-selekmanSu espíritu creativo e innovador le ha permitido combinar la perspectiva colaborativa del modelo orientado a soluciones con el enfoque del arte, el juego y el sentido del humor. A continuación 6 actividades lúdicas y experimentos para el trabajo con el niño y su familia nos dan muestra de su proverbial ingenio.

1) La máquina de rayos X de sentimientos imaginaria

Cuándo usarse: En casos de niños que no verbalizan o tienen dificultad para expresar sus sentimientos

Procedimiento:

Dile al niño y a su familia que tienes una máquina  increíble que puede mostrar fotos de cómo se ven los sentimientos por dentro. Da instrucciones al niño de que se recueste en el piso sobre una gran hoja de papel y seleccione a un miembro de la familia para que dibuje el contorno de su silueta. Luego pide al niño dibujar sus sentimientos y contar una historia sobre cada uno de ellos. Puede utilizar caritas expresivas o colores para cada uno de ellos. Por último, invita a los miembros de la familia a dar sus impresiones.  

2) El retrato familiar

Cuándo usarse: En casos de niños pequeños o poco expresivos. Cuando queremos desafiar los patrones y las creencias de la familia.

Procedimiento:

Pide al niño que dibuje a su familia tal y como la ve en el presente. Luego pide al niño que dibuje como le gustaría ver a su familia. Conversa con los demás miembros de la familia sobre las diferencias apreciadas.


3) La máquina del tiempo imaginaria

Cuándo usarse: En casos en que la terapia está atorada en el problema. Permite a la familia recordar éxitos pasados, estrategias útiles de solución y cosas divertidas que solían hacer para llevarse mejor.

Procedimiento:

Comparte con el niño y su familia la idea de que en la esquina de tu oficina hay una máquina que puede llevarlos a viajar por el tiempo. El menor podrá viajar para conocer a un personaje histórico famoso o la familia podrá verse interesada en viajar hacia el momento en que no estaba presente el problema. Dile a la familia que si viajan juntos estén alerta a todas las sensaciones de la experiencia: qué ven, qué escuchan, sienten, prueban, etc.

4) Inventos invisibles de la familia

Cuándo usarse: La familia se encuentra plagada de patrones negativos de interacción y creencias fijas acerca del problema. Proporciona una postura lúdica en la búsqueda de soluciones.

Procedimiento:

Pregunta al niño que, en caso de inventar una máquina que beneficiara a otras familias como la suya, ¿Cómo luciría?, ¿Qué haría?, ¿Cómo le beneficiaría a él?, ¿A sus padres? Hazle conocer a los miembros de la familia que otros clientes han intentado crear también sus propios inventos.    

5) El niño como nuevo director del drama familiar

Cuándo usarse: Con familias crónicamente oprimidas por sus dificultades, en donde el niño aparece como el escape familiar. También puede utilizarse en familias en donde se ha perdido la capacidad de juego y diversión.

Procedimiento:

Haz que el niño adopte el rol de director o productor de un nuevo programa televisivo protagonizado por su familia. Detrás la cámara él dirigirá a los miembros de la familia pidiéndoles que recreen escenas, nuevos roles, diálogos a recitar y dirigiendo actuaciones. El proceso completo debe grabarse para que la familia pueda revisarlo y elaborar comentarios acerca de la dirección y producción del niño.   

6) Equipo de género animal

Cuándo usarse: En caso de niños muy pequeños (en edad preescolar) para utilizar el recurso de la imaginación en la búsqueda de soluciones.

Procedimiento:

Pide al niño que invite a participar en la sesión de terapia a sus personajes animales favoritos. Haz que te presente a cada uno de ellos y te cuente lo que más le gusta de ellos. En forma concreta, habla acerca del problema presentado e interroga con el niño a cada uno de los animales sobre qué harían para tratar de resolver su problema.



Fuente: Selekman, Matthew. Colaborative Brief Therapy with children. The Guilford Press, New York, 2010.